Sean eternos
los fantasmas que supimos conseguir.
En una
casita noble de San Miguel de Tucumán en 1816 y por este rincón del mapa, empezaba
un buen intento de protagonizar una nueva historia… se cortaban los vínculos
con la monarquía española. Todo se hacía con viejas recetas empíricas del dogma
sistémico.
Más allá de
algunos intentos frustrados que encarnaron Belgrano y Castelli x entonces nunca
se pensó en nuestros pueblos profundos,
en las mujeres y en sus derechos, en nuestra
savia territorial, en fin en nuestra gente de la tierra.
Muchas
décadas han pasado y a casi dos siglos de aquel intento primero, corresponden
las mismas preguntas: ¿Somos
independientes? … ¿Queremos ser independientes?...¿Qué es la independencia?
Como puede
la historia de un mundo, de una región, de un país, en fin, de un conglomerado
de reglas insanas, girar en círculo inhumano
excluyendo al sentido común, a la lógica del pensamiento y a las
personas; reemplazándolas por secundariedades tóxicas marketinadas como verdades absolutas.
Hoy hubo y
habrá muchos discursos, llenos de
expresiones repetidas donde la frase
“Feliz Día de la Independencia”. posiblemente arrancará huecos aplausos y
carenciados deseos de ser alguien ó algo que enfrenta a lo establecido en un
mundo interdependiente, sometido a leyes de control humano y en manos, como
diría un cantautor catalán, “de unos locos con carnet”. Mañana lo mismo
sucederá en otro país, en otra necesidad…
Hoy más que
nunca debemos encarnar ese tramo que
solemos cantar en vacíos actos de formalidad abstracta que reza…”libertad,
libertad, libertad”.
2 comentarios:
gran verdad. comparto. Paula
Gracias por estar troyanos muy lindo programa el del 9 de julio, con muchas verdades que otros no dicen
Maria
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